Efectos colaterales de la frustración que puede provocar tener que conformarse con una sola vida:
- Emborracharse, drogarse y vivir la vida al límite.
- Hacer puenting, rafting,bungee jumping o cualquier otra cosa que termine en -ing.
- Dar la vuelta al mundo (esto sólo para ricos)
- Creer en la reencarnación.
- Crear un blog que permita ser protagonistas de muchas otras vidas.
Cabezas de Ajo optó hace años por esta última opción. Lo cual no tiene por qué excluir alguna de las anteriores.



lunes, 12 de marzo de 2012

La ejecutiva que nunca llevaba carreras en las medias



por Marta



Todas las mañanas cojo el tren de Cercanías que me lleva desde Pirámides hasta Chamartín. Suelo encontrarme con las mismas caras, casi siempre bostezando aburridas, hastiadas, unos días con legañas y otros con más. Pequeños corderitos en los raíles de la vida.

Esta mañana en la parada de Recoletos han bajado la madre con su hijo de uniforme, la ejecutiva que nunca lleva carreras en las medias y el funcionario que sólo se afeita los lunes por la mañana. A los que se bajan los suelo tener controlados, a los que suben no.

En esa misma parada hoy se ha subido un pescador. Llevaba su pipa, su red y un chubasquero amarillo que goteaba agua salada. Ha dejado el cubo y el gancho a mi lado. Creo que había tres o cuatro pulpos en su interior pero no he podido verlo bien porque me mojaba los pies con el charco y me he cambiado de sitio. Le ha debido ir bien la mañana, a juzgar por su cara.

Al llegar a Nuevos Ministerios se ha bajado el hombre de traje a rayas y maletín de cuero. Un día más he cogido prestado su periódico.

Un día más.

Salvo por la incipiente carrera que hoy asomaba tímida por el talón de la ejecutiva.